Si el año pasado tuvimos un heavy, este año toca un rastas. Jaume Mas dejó con la boca abierta a los coach haciendo una versión un tanto especial del tema «Toda una vida»
La rubia Haley Haitz y su banjo consiguieron a su coach favorito. Antonio Orozco fue el único en girar su silla y fue toda una alegría para esta cantante de 19 añitos.
Alma y corazón. Esas dos cosas, además de su fabulosa voz, fueron las dos cosas que hicieron que este californiano de Guadix llamado Damon Robinson encandilara a los cuatro coaches.
Rosario y su coach pujaron por el torrente de voz de Rocío Rivas, una maestra de Educación Musical que vió como su disco en solitario no salió a la luz por culpa de la crisis.
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